Deslinde

Cada rincón de tu propiedad cuenta

Tu propiedad es única y es tuya, no permitas que por culpa de un dibujo mal hecho (catastro) te quiten parte de tu finca.

Dejar definidos correctamente los límites con las fincas vecinas.

¿Qué es el deslinde?

El deslinde es un proceso que consiste en marcar y señalizar los límites de un terreno utilizando elementos permanentes como mojones. Este procedimiento tiene como objetivo establecer el derecho de propiedad y la facultad de exclusión sobre una propiedad inmobiliaria.

Tanto los propietarios o titulares de derechos reales como la administración (en el caso de terrenos de su propiedad) pueden llevar a cabo el procedimiento de deslinde.

Existen diferentes formas de iniciar el deslinde, cada una con sus propios procedimientos. Una vez que se aprueba el deslinde, el beneficiario tiene la opción de realizar el amojonamiento para establecer límites físicos con las propiedades vecinas. Los elementos utilizados para la demarcación no pueden ser removidos por terceros.

Requisitos para realizar un deslinde

En primer lugar, debe haber áreas de terrenos o fincas cuyos límites sean inciertos o sobre los cuales las partes involucradas tengan opiniones divergentes. Esto puede ser el resultado de una disputa entre dos o más propietarios sobre la identificación de los linderos de un terreno o propiedad inmobiliaria.

Es necesario contar con un profesional con conocimientos en topografía. Se requiere disponer del plano catastral de la propiedad a deslindar y de las propiedades colindantes en conflicto. También se deben llevar a cabo trabajos de levantamiento, establecer los puntos comunes con otros propietarios y realizar un replanteo.

Derechos adquiridos

El deslinde garantiza el derecho de propiedad sobre el terreno o finca que se delimita. El titular adquiere así el poder de uso y disfrute dentro de los límites establecidos por la ley.

Como consecuencia, se destaca el derecho de exclusión. Con el deslinde, el propietario tiene la autoridad para utilizar, disfrutar y excluir a otros de ese terreno.

Beneficios del deslinde y amojonamiento

Cada propietario tiene un conocimiento claro y preciso de cuál es su propiedad y hasta dónde se extiende su dominio. Se previenen futuros conflictos derivados de la falta de demarcación. Existe la posibilidad de realizar el amojonamiento, que es la colocación física de hitos o mojones en los límites establecidos. Sin un deslinde previo, no es posible llevar a cabo una división física de la propiedad, y ningún tercero puede remover los mojones colocados legalmente.

El deslinde es un proceso clave para marcar y señalizar los límites de un terreno, asegurando que cada rincón de tu propiedad esté correctamente definido. Este procedimiento, que puede ser realizado tanto por propietarios como por la administración, establece el derecho de propiedad y la facultad de exclusión sobre la propiedad inmobiliaria. Consiste en utilizar elementos permanentes como mojones para delimitar físicamente los terrenos y evitar disputas futuras con vecinos.

El deslinde es necesario cuando los límites de una propiedad son inciertos o existen conflictos entre propietarios. Para llevarlo a cabo, es indispensable contar con un profesional en topografía, disponer del plano catastral de las propiedades involucradas y realizar un levantamiento topográfico que establezca los puntos comunes entre las propiedades en disputa. Una vez aprobado el deslinde, se puede proceder con el amojonamiento, que consiste en colocar físicamente los hitos o mojones en los límites definidos, los cuales no pueden ser removidos por terceros.

Este procedimiento garantiza los derechos de propiedad, permitiendo al titular usar y disfrutar de su terreno dentro de los límites establecidos. También otorga el derecho de exclusión, dándole al propietario la autoridad de impedir el uso de su terreno por otros. Los beneficios del deslinde y amojonamiento son claros: los propietarios saben con precisión hasta dónde se extiende su dominio, se previenen conflictos futuros y se asegura una división física adecuada de la propiedad.